El paso de Alberto Fernández por México
Esta semana Alberto Fernández estrenó su traje de presidente en una primera gira internacional, antes de asumir el poder el próximo 10 de diciembre. La misma tuvo como destino México, donde Fernández se reunió con el presidente Andrés Manuel López Obrador, mantuvo encuentros con empresarios y un funcionario clave del gobierno de Donald Trump, así como también brindó una clase magistral en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Alberto Fernández y Andrés Manuel López Obrador.
La comitiva que viajó junto a Alberto Fernández incluyó a Felipe Solá, quien se consolida como futuro Canciller, Matías Kulfas y Cecilia Todesca, ambos referentes del equipo económico del nuevo gobierno, así como también su vocero, Juan Pablo Biondi y el exfuncionario y operador político, Miguel Ángel Cuberos. De hecho, Matías Kulfas es señalado como la persona que podría ocupar el Ministerio de Economía, luego de la asunción de Fernández. De hecho, desde algunos medios se especuló con que el viaje podría está orientado a avanzar con destrabar y generar acuerdos de exportación para varias industrias, como autos y carnes.
El encuentro del presidente electo con López Obrador podría marcar el inicio de un período de mayor cercanía en la relación entre Argentina y México. AMLO busca posicionarse como líder de referencia de la izquierda latinoamericana, un tanto huérfana tras el fallecimiento o caída de muchos de sus dirigentes. Posiblemente Argentina, México y Uruguay pasen a ser socios en un abordaje conjunto a la crisis venezolana, que busque diferenciarse del Grupo de Lima, alineado con Juan Guaidó, y a la vez marcando cierta distancia con Caracas.
Pero la agenda latinoamericana no fue la única de las preocupaciones de Fernández, quien se hizo de tiempo para almorzar con Mauricio Claver-Carone, el principal asesor de Donald Trump para la región. Fernández y Claver-Carone hablaron sobre América Latina, centralmente lo que sucede en Chile y el presidente electo le expresó su preocupación por lo que pasa en Ecuador. Pero como era inevitable, la cuestión de la deuda externa y la relación con el FMI se puso sobre la mesa de discusión. Al respecto el presidente electo argentino sostuvo: “El Fondo tiene que asumir la responsabilidad que tuvo, quiero que revise lo que hizo y nos ayude a pagar. Nuestra decisión de pagar está”.
En este contexto de cambios en la política regional, una relación comercial bilateral más fuerte con México podría ser visto como un movimiento estratégico, previendo una relación comercial más tensa con Brasil.
Por último, la gira de Alberto tuvo su costado corporativo, la cual incluyó una reunión con el millonario empresario Carlos Slim, una cena con los principales grupos económicos mexicanos y una visita a la sede de la multinacional argentina de servicios informáticos, Globant.
Con todas estas actividades, el viaje de Alberto Fernández a México podría tener la clave para entender hacia dónde irá la política exterior del nuevo gobierno argentino y sus vínculos económicos. En efecto, desde antes de la elección de Fernández, el presidente de Brasil, principal socio comercial de Argentina, Jair Bolsonaro, ha asumido una posición extremadamente crítica y dura hacia el que será el nuevo gobierno argentino.
Sin dudas, temas como el futuro de la agenda de liberalización comercial del Mercosur, de la mano de acuerdos estratégicos como el celebrado con la UE y el EFTA, así como la posición a asumir respecto de Venezuela, prometen generar rispideces entre Alberto Fernández y Bolsonaro. A esto se suma el alineamiento del presidente electo con los líderes de la izquierda latinoamericana, como López Obrador, el Frente Amplio uruguayo, y el Partido de los Trabajadores en Brasil.
En este contexto de cambios en la política regional, una relación comercial bilateral más fuerte con México podría ser visto como un movimiento estratégico, fortaleciendo algunos sectores como el automotriz, previendo una relación comercial más tensa con Brasil.